Lunes de reciclaje; éste post fue publicado el 27 de febrero del 2005 en Surfing el Amazonas, y trata sobre hallazgos arqueológicos en nuestro ahora maltratado sur chico.
El Comercio en su edición del domingo 27 de febrero del 2005, informa sobre el descubrimiento de figuras Paracas, muy similares a las mundialmente conocidas líneas de Nazca que serían mucho más antiguas que estas. Los estudios e investigaciones empezaron hace diez años, dice nota adjunta, y se añade más información sobre lo descubierto. Opinan también otros arqueólogos como Walter Alva. El artículo está firmado por Johny Isla Cuadrado, Arqueólogo y José Rosales Vargas. En la edición impresa se incluyen fotos y mapas que no figuran en la edición online. Que pena.
Sobre la ladera de los cerros que se extienden en gran parte del territorio de la provincia de Palpa se han descubierto figuras que confirman que el diseño y la elaboración de los primeros geoglifos (lo hicieron) los hombres de esta antigua comunidad peninsular mucho antes de aquellos que construyeron los nascas. Después de una serie de investigaciones físicas que incluyeron análisis de carbono 14, así como de luminiscencia a los sedimentos que forman parte de este conjunto de dibujos, y del descubrimiento hace un año en el valle de Palpa del asentamiento arqueológico de Jauranga, se demuestra la antiguedad de los cinco primeros períodos de existencia de esta cultura.
"Esto ha servido para confirmar lo que hasta hace algunos años era una hipótesis", afirma convencido el arqueólogo Johny Isla Cuadrado, director del Instituto Andino de Estudios Arqueológicos (Indea) y jefe del proyecto arqueológico Nasca-Palpa. "En esta investigación que ya lleva seis años y prosigue con el estudio y documentación de los geoglifos existentes en la provincia de Palpa, se han descubierto recientemente nuevas figuras zoomorfas y antropomorfas que datan exclusivamente de la cultura Paracas y del período tardío de su desarrollo (600-100 a.C.), que demuestran que la construcción de los geoglifos la iniciaron los hombres de esta cultura mucho antes que los nascas", precisa.
Estos hallazgos, añade el investigador, brindan nuevas luces sobre la ocupación de la cultura Paracas en los valles de la cuenca del río Grande, considerada hasta hace poco, incluso por los arqueólogos, una zona marginal y de tránsito de los hombres de esa civilización. "En el valle de Palpa existen los asentamientos de Mollaque, Casablanca o Cerro Paracas y Jauranga, que fueron ocupados de manera permanente por esta cultura. Eran asentamientos estables, con pobladores dedicados a la agricultura, a la ganadería y también a la producción artesanal. Elaboraron cerámica muy fina y aunque no hay aún evidencias de sus afamados textiles, se ha llegado a determinar que no eran poblaciones errantes", explica. Probablemente existió, dice Isla, una clase dirigente y sacerdotes que se dedicaron a producir imágenes que permanecieran en la mente de sus pobladores y a través de ellas expresar sus creencias, cultos y rituales vinculados posiblemente al agua.
"Está ocupación ocurrió con certeza entre los 600 y 550 a.C. y abarcó incluso hasta el inicio de nuestra era y la posterior aparición de los nascas", refiere. Isla señala que en este conjunto de cincuenta figuras, que forman parte de un gran complejo cultural y la expresión artística de esta antigua civilización, están representados seres humanos (familia real), animales (aves, mono, felinos) y el dios oculado (principal divinidad paracas). "Las dos figuras que se han encontrado entre las laderas y que representan a esta divinidad constituyen las primeras representaciones en geoglifo del principal dios de la cultura Paracas, que aparece siempre en sus famosos textiles (mantos) y hermosa cerámica", señala.
Para el estudioso, estos hallazgos confirman que los creadores iniciales de los geoglifos y las primeras producciones de estas figuras son los hombres paracas, los cuales dejaron a los nascas como continuadores de esta expresión artística. "Con esta investigación quedan de lado aquellos estudios que afirmaban que la influencia de la cultura Paracas en los valles de Palpa y Nasca era limitada y casi inexistente y que la cerámica encontrada llegó ocasionalmente. Se ha determinado que en el valle de Palpa hubo una ocupación constante y permanente, una vida activa de pobladores de la cultura Paracas que elaboraron estos geoglifos como parte de su tradición y estilo artístico", remarca.
"No se ha podido establecer si los paracas elaboraron estas figuras en forma paralela a sus ceramios y tejidos". "Es hora de desentrañar el misterio paracas, aunque algunos no aceptan que los primeros geoglifos son de ese pueblo".
El artículo original ya no está disponible en la web de El Comercio, por lo que he eliminado todos los enlaces que puse, pero encontré luego una versión "cached" en Google, y eso es lo que he puesto. Pueden leer El Señor de Palpa, un artículo sobre el descubrimiento mas conocido del proyecto. Y el sitio oficial del proyecto arqueológico Nasca-Palpa, que cuenta con financiamiento alemán. Las imágenes de éste post las obtuve de dicha web. Finalmente, espero que el reciente terremoto no haya dañado los lugares mencionados.
Sobre la ladera de los cerros que se extienden en gran parte del territorio de la provincia de Palpa se han descubierto figuras que confirman que el diseño y la elaboración de los primeros geoglifos (lo hicieron) los hombres de esta antigua comunidad peninsular mucho antes de aquellos que construyeron los nascas. Después de una serie de investigaciones físicas que incluyeron análisis de carbono 14, así como de luminiscencia a los sedimentos que forman parte de este conjunto de dibujos, y del descubrimiento hace un año en el valle de Palpa del asentamiento arqueológico de Jauranga, se demuestra la antiguedad de los cinco primeros períodos de existencia de esta cultura.
"Esto ha servido para confirmar lo que hasta hace algunos años era una hipótesis", afirma convencido el arqueólogo Johny Isla Cuadrado, director del Instituto Andino de Estudios Arqueológicos (Indea) y jefe del proyecto arqueológico Nasca-Palpa. "En esta investigación que ya lleva seis años y prosigue con el estudio y documentación de los geoglifos existentes en la provincia de Palpa, se han descubierto recientemente nuevas figuras zoomorfas y antropomorfas que datan exclusivamente de la cultura Paracas y del período tardío de su desarrollo (600-100 a.C.), que demuestran que la construcción de los geoglifos la iniciaron los hombres de esta cultura mucho antes que los nascas", precisa.
Estos hallazgos, añade el investigador, brindan nuevas luces sobre la ocupación de la cultura Paracas en los valles de la cuenca del río Grande, considerada hasta hace poco, incluso por los arqueólogos, una zona marginal y de tránsito de los hombres de esa civilización. "En el valle de Palpa existen los asentamientos de Mollaque, Casablanca o Cerro Paracas y Jauranga, que fueron ocupados de manera permanente por esta cultura. Eran asentamientos estables, con pobladores dedicados a la agricultura, a la ganadería y también a la producción artesanal. Elaboraron cerámica muy fina y aunque no hay aún evidencias de sus afamados textiles, se ha llegado a determinar que no eran poblaciones errantes", explica. Probablemente existió, dice Isla, una clase dirigente y sacerdotes que se dedicaron a producir imágenes que permanecieran en la mente de sus pobladores y a través de ellas expresar sus creencias, cultos y rituales vinculados posiblemente al agua.
"Está ocupación ocurrió con certeza entre los 600 y 550 a.C. y abarcó incluso hasta el inicio de nuestra era y la posterior aparición de los nascas", refiere. Isla señala que en este conjunto de cincuenta figuras, que forman parte de un gran complejo cultural y la expresión artística de esta antigua civilización, están representados seres humanos (familia real), animales (aves, mono, felinos) y el dios oculado (principal divinidad paracas). "Las dos figuras que se han encontrado entre las laderas y que representan a esta divinidad constituyen las primeras representaciones en geoglifo del principal dios de la cultura Paracas, que aparece siempre en sus famosos textiles (mantos) y hermosa cerámica", señala.
Para el estudioso, estos hallazgos confirman que los creadores iniciales de los geoglifos y las primeras producciones de estas figuras son los hombres paracas, los cuales dejaron a los nascas como continuadores de esta expresión artística. "Con esta investigación quedan de lado aquellos estudios que afirmaban que la influencia de la cultura Paracas en los valles de Palpa y Nasca era limitada y casi inexistente y que la cerámica encontrada llegó ocasionalmente. Se ha determinado que en el valle de Palpa hubo una ocupación constante y permanente, una vida activa de pobladores de la cultura Paracas que elaboraron estos geoglifos como parte de su tradición y estilo artístico", remarca.
"No se ha podido establecer si los paracas elaboraron estas figuras en forma paralela a sus ceramios y tejidos". "Es hora de desentrañar el misterio paracas, aunque algunos no aceptan que los primeros geoglifos son de ese pueblo".
El artículo original ya no está disponible en la web de El Comercio, por lo que he eliminado todos los enlaces que puse, pero encontré luego una versión "cached" en Google, y eso es lo que he puesto. Pueden leer El Señor de Palpa, un artículo sobre el descubrimiento mas conocido del proyecto. Y el sitio oficial del proyecto arqueológico Nasca-Palpa, que cuenta con financiamiento alemán. Las imágenes de éste post las obtuve de dicha web. Finalmente, espero que el reciente terremoto no haya dañado los lugares mencionados.
2 comentarios:
y de quién se inspirarían los paracas?
o sería su inspiración propia
Eso, viajemos en el tiempo para averiguarlo.
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